¿CÓMO NOS AFECTAN LAS TEMPERATURAS?
- Ágora psicólogas

- 22 mar 2018
- 3 Min. de lectura
En las últimas semanas, estamos soportando una gran ola de calor por gran parte de España, llegando en algunos lugares a soportar más de 40 grados.
No podemos dudar de que la vida con estas temperaturas se hace bastante difícil, ya que tenemos que tomar precauciones, tanto con la hidratación como con las posibles quemaduras del sol. Pero ¿qué pasa con nuestro estado de ánimo? ¿Se ve también afectado?
En primer lugar hay un factor muy importante relacionado con las altas temperaturas, que es la falta de sueño. Todo hemos vivido una noche calurosa, en la que se nos hacía prácticamente imposible dormir, y si lo conseguíamos nos levantábamos con la sensación de no estar descansados.
Esta falta de sueño puede afectar al estado de ánimo con síntomas como cansancio, apatía, cambios de humor, negatividad e impaciencia.
Otro factor podría ser la interpretación que las personas le pueden dar a las altas temperaturas: si éstas lo interpretan como amenazante se podrían dar episodios de ansiedad.
Por ultimo también debemos de tener en cuenta la importancia de realizar actividades agradables como comentábamos en nuestro blog anterior (LINK).
Las altas temperaturas nos limitan las horas a las que podemos salir a la calle. Así, cuando en otras estaciones quedar con amigos para tomar café a las 4 puede ser de lo más agradable, con estas altas temperaturas nos puede resultar bastante incómodo. Por lo cual también se pueden dar episodios de depresión.
Además de la falta de sueño, ansiedad y depresión numerosas investigaciones demuestran como las altas temperaturas nos afectan, favoreciendo la irritabilidad y la agresividad.
Pero ¿por qué ocurre esto?
Según el vicepresidente de la Asociación Española de Psiquiatría Privada, José Antonio López Rodríguez, la temperatura externa que el cuerpo necesita para dormir bien es, aproximadamente, 21 grados y con más calor se produce una hiperactivación del metabolismo para adaptarse y una activación cerebral que da lugar a un incremento de los trastornos del sueño y la ansiedad.
Pero estos síntomas de activación no nos duraran todo el verano, ya que se considera un síndrome adaptativo que va desapareciendo con los días. Por ello aunque en agosto las temperaturas suelen ser más altas que el Julio, en estos días podemos decir que el calor nos afecta en mayor medida. Como conclusión podemos decir que en Julio aun nos estamos adaptando al cambio de temperatura, mientras en Agosto ya estaremos adaptados.
Como consecuencia de este aumento de la irritabilidad nos podemos encontrar estudios que demuestran cómo, con altas temperaturas aumentan:
· Los crímenes violentos
Los investigadores de la Universidad de California en Berkeley analizaron 60 estudios previos en los Estados Unidos sobre las tasas de crímenes violentos y encontraron un vínculo entre la violencia y el calor, así como con las lluvias extremas.
Encontraron que en estas circunstancias los conflictos intergrupales (guerras, conflictos armados) subieron un 14% mientras que los casos de violencia interpersonal (violaciones, violencia doméstica, homicidios) aumentaron un 4%.
· Los suicidios
Algunas investigaciones han sugerido que los suicidios son más frecuentes a finales de la primavera y principios del verano, un fenómeno que se observó por primera vez en el siglo XIX. Aunque algunos estudios han contradicho este hallazgo, otra investigación apoya la existencia de un pico estacional de suicidio.
Los estudios han sugerido que el sol y las temperaturas más altas podrían estar relacionados con pensamientos suicidas y las tasas de suicidio más altas, incluso a pesar de la asociación general de los meses más fríos con la tristeza y el aislamiento.
· Los casos de TOC (Trastorno obsesivo compulsivo)
En una investigación realizada en un centro de Salud de Murcia, se constató que con temperaturas superiores a 30ºC, los casos de TOC’s aumentaban en las urgencias psiquiátricas. De la misma forma, los días lluviosos y grises, había un mayor número de casos de intentos de suicidios y delirios.






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